lunes, 1 de septiembre de 2025

¿Es posible poner a la inteligencia artificial al servicio del arte y la cultura en Ecatepec?

 




La inteligencia artificial (IA) es un campo de la informática que se centra en la creación de sistemas y programas que puedan realizar tareas que hasta hace poco requerían inteligencia humana. Se basa en la idea de que las máquinas pueden programarse para imitar la inteligencia humana y, en algunos casos, superarla. La inteligencia artificial se divide en varios subcampos, como el aprendizaje automático y el procesamiento del lenguaje natural, que se utilizan para crear sistemas que pueden aprender y mejorar con el tiempo. 

La Inteligencia Artificial se ha implementado cada vez en más cosas a lo largo del tiempo, desde carros con cierta capacidad de autonomía, chatbots (asistentes virtuales) y muchas otras aplicaciones que se van a hablar en este artículo. Este gran avance trae muchos cambios a nuestras vidas y como cualquier cambio trae consigo cosas buenas, como lo es el uso de esta herramienta para facilitar muchas tareas y tener un porcentaje más alto de eficacia, pero, por otro lado, también trae nuevas problemáticas, como el miedo de la sociedad, al cómo puede afectarnos esto en nuestra vida diaria, si es bueno o malo para nosotros, en general trae consigo muchos planteamientos de cuestiones éticas y morales. 

 



La inteligencia artificial (IA) suele percibirse como una amenaza para la creatividad humana. Sin embargo, cada vez más gestores culturales la utilizan no para sustituir la imaginación, sino para potenciar los proyectos. Generar murales con una visión artistica y original del ambito en donde se desarrolla, brinda mayor identidad y pertenencia a las comunidades.

 

Desde coescribir guiones hasta visualizar prototipos, las herramientas de IA se han convertido en auténticos colaboradores en los procesos de producción y creación cultural. Se trata de una herramienta que ayuda más y coadyuva, pero no es una amenaza. 

  

Este cambio refleja una tendencia más amplia en la innovación: pasar de la simple automatización a la ampliación exponencial del potencial humano. En el emprendimiento cultural, se abren nuevos horizontes para generar valor, promover la inclusión y ampliar el alcance de los proyectos como nunca antes se había visto. 

 

La IA puede coadyuvar en la creación del arte y la cultura; sin embargo, el control pleno y supervisión debe recaer en la creatividad y la imaginación humana. 

  

Cómo usa la IA de forma creativa en el sector cultural 

 

En el sector cultural, la IA no se limita a mejorar la eficiencia; su verdadero impacto está en ampliar el repertorio creativo: 

 

  • IA generativa para artes visuales: Plataformas como DALL·E y Midjourney sirven para crear storyboards de escenografías teatrales o prototipar identidades visuales para exposiciones comunitarias. 

 

  • Asistentes de escritura creativa: Escritores utilizan ChatGPT o Sudowrite para generar ideas de historias, traducir textos o desarrollar conceptos multilingües. 

 

  • Herramientas de audio y música: Aplicaciones como Aiva o Boomy permiten a startups culturales experimentar con paisajes sonoros para eventos o narrativas digitales. 

 

En todos estos casos, el papel humano sigue siendo el de comisario, supervisor editor y director del resultado que ofrece la IA, siempre como titular y responsable último. 

 

Implicaciones culturales y bases éticas de la Inteligencia Artificial en la gestión de proyectos culturales 

 

En el ámbito de la gestión cultural se trabaja a menudo con temas de identidad, equidad y comunidad, por lo que integrar la IA exige un enfoque sensible y ético: 

 

  • Revolución de las Conciencias con IA: Entender que la IA refleja prejuicios humanos si no se supervisa, y es importante prestar atención a estas limitaciones. 

 

  • Transparencia: Comunicar cuándo y cómo se ha utilizado la IA en el proceso creativo, para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas. 

 

  • Autoría compartida: Redefinir la propiedad intelectual como una co-creación en lugar de un acto individual, ya que participa una entidad externa. 

  

Estos principios coinciden con el Reglamento de IA de la UE y las recomendaciones éticas de la UNESCO para el uso de IA en la cultura (UNESCO, 2023). 

 

La co-creación es el futuro 

 

Para las personas que trabajan en el exterior cultural, el mensaje es claro: la IA no es el final de la autoría, sino el inicio de un nuevo paradigma de diseño colaborativo.  

 

Los artistas deben mantener el control editorial total, a pesar del uso de la IA para acelerar ensayos y probar la dinámica de las escenas.  

 

Al combinar la sensibilidad cultural con la exploración tecnológica, los creadores pueden construir un futuro donde la tecnología enriquezca la expresión cultural en lugar de limitarla. Generar murales con IA y diseñar espacios culturales acordes a lo que demanda la población, permite que la creación artificial se manifieste en bienestar a la gente. 

 

Ecatepec está listo para cursar un sendero de arte y cultural donde coadyuve la inteligencia artificial, es una pregunta que hoy en día se escucha con mayor insistencia.

No hay comentarios: