jueves, 26 de noviembre de 2020

Se lanza una consulta sobre presupuesto participativo de Ecatepec 2021 sin que la ciudadanía sepa con claridad los objetivos y las metas del mismo.

 


El gobierno de Ecatepec aplicará el modelo de Presupuesto Participativo para el 2021, por lo que el domingo 29 de noviembre realizará una encuesta en la que la ciudadanía podrá opinar en qué se debe aplicar el presupuesto municipal del próximo año, que será contestada de manera presencial y por dispositivos digitales.

El modelo permitirá que los propios habitantes decidan las obras prioritarias requeridas para el desarrollo de sus comunidades, lo que por primera vez se realiza en Ecatepec en este gobierno, ya que dicha experiencia se tuvo en el periodo 2006 – 2009.

Sin embargo, existen diversos cuestionamientos en cuanto a la puesta en marcha de dicho modelo, ya que se vislumbra que su apresurada aplicación, la falta de información a la ciudadanía sobre el tipo de obras a implementar y la falta de organización de las comunidades puede derivar a un fracaso total. 

El próximo 29 de noviembre se instalarán cuatro puntos para la consulta ciudadana, ubicados en San Cristóbal centro y en las tres sedes alternas del gobierno municipal: CROC Aragón, Santa María Tulpetlac y Ciudad Cuauhtémoc.

Las autoridades de Ecatepec instalarán varias mesas en dichas sedes donde la ciudadanía contestará una encuesta en la que opinen qué obras consideran prioritarias para el desarrollo de Ecatepec y para cuya realización se destinarán recursos económicos durante el 2021. 

La consulta se efectuará de 10:00 a 16:00 horas y los participantes sólo deben acreditar con su credencial del Instituto Nacional Electoral (INE) que habitan en Ecatepec, para lo cual se respetarán en todo momento las medidas sanitarias recomendadas por las autoridades para prevenir contagios del Covid-19. 

Además, el gobierno municipal implementará una logística para recibir opiniones y también se va a abrir un página de internet para que la ciudadanía de Ecatepec participe desde dispositivos digitales, lo que garantizará que la participación sea amplia y nadie sea excluido. 

Los resultados de la encuesta serán presentados ante el cabildo de Ecatepec, para que el cabildo tome las decisiones correspondientes y determinen la forma de aplicar los recursos municipales.

Cabe recordar, que el presupuesto de Ecatepec es superior a los cinco mil millones de pesos, aunque debido a la pandemia por el Covid-19 y a la reducción de participaciones federales y estatales, además de la caída en la recaudación de ingresos propios, se prevé que el próximo año haya una disminución en los recursos municipales.

El monto de recursos que se prevé se tenga para este fin es de 780.5 millones de pesos.

Hay que señalar, que el Presupuesto Participativo en el 2006 se implemento en el Gobierno de José Luis Gutiérrez Cureño, dando lugar a resultados claros y oscuros, claros en cuanto a lo que estaba plasmado en su documento original y oscuro en torno a sus resultados, ya que las decisiones de asamblea que se llevaban a cabo en las colonias, unidades habitacionales, conjuntos urbanos, fraccionamientos, barrios y pueblos de Ecatepec, no lograron alcanzar las metas y los objetivos que se esperaban.

Asimismo, debe mencionarse, que el Presupuesto Participativo debe buscar:

·         Que desde los gobiernos locales sea posible impulsar una participación ciudadana activa para fortalecer la construcción de nuevas relaciones gobierno– ciudadanía, más horizontales, incluyentes, democráticas y genere bienestar.

·         Que el Presupuesto Participativo, su manejo sea transparente y se rinda cuenta a los habitantes de cada demarcación territorial en cuanto a la aplicación de los recursos, tipo de obra y forma de organización y supervisión de los responsables ciudadanos de vigilar para la correcta aplicación de los recursos, sin olvidar que sea un detonador de empleo en las propias comunidades, esperamos que sea pensado de esta manera, sobre todo en estos momentos de crisis económica derivado de la pandemia Covid 19, donde la gente requiere de trabajo y oportunidades en su propia comunidad.

·         Generar mejores condiciones de relación entre las autoridades de gobierno municipal y la propia ciudadanía, donde ambas partes de manera organizada y estructural, sienten las bases en la construcción de ciudadanía activa y corresponsable en el quehacer de gobierno, en la perspectiva de una cultura democrática y sobre todo en el ejercicio ético y profesional del poder público. Es cerrarle el paso a la corrupción en sus diferentes formas.

·         Los presupuestos Participativos tienen como meta mejorar las condiciones de vida de la población y avanzar de manera comprometida a un entendimiento claro, elocuente y significativo en brindar las obras y servicios que demanda la ciudadanía en cada ámbito territorial.

·         Los recursos en el Presupuesto Participativo, tiene la urgencia de que estos contribuyan a que la ciudadanía pueda participar activamente, es necesario que disponga de toda la información necesaria que les permita definir y decidir en que puede ejercerse el presupuesto participativo, que beneficios brinda a la población y de que manera contribuye al desarrollo territorial sustentable entre las propias colonias, fraccionamientos, conjuntos urbanos, unidades habitacionales, barrios y pueblos que conforman a Ecatepec.

De acuerdo a la información que se dispone sobre este tema de la consulta, dada a conocer por el Ayuntamiento de manera reciente, no brinda a las comunidades los espacios necesarios para generar mejores condiciones de organización, definición y acuerdos en cuanto al tipo de obras que requiere cada comunidad.

Veremos que resultado arroja la consulta en cuanto al nivel de participación y tipo de obra que solicita la ciudadanía en su comunidad, será el análisis de los propios resultados que nos brindará los indicadores de lo que desea la ciudadanía en sus comunidades en materia de obras.

sábado, 21 de noviembre de 2020

Como diría Andrés: “Que nos den por muertos, ya que causa polémica y pone nerviosos a nuestros adversarios”.

 


Como no recordar, aquellas palabras, cuando el entonces jefe de gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, decía con plenitud al inicio del 2003: “a mí que me den por muerto para las elecciones presidenciales del 2006, porque este tema causa mucha polémica y pone nerviosos a mis adversarios”.

 “Yo ya dije claramente que no estoy pensando en el 2006, pero es en serio porque tengo una responsabilidad como jefe de gobierno, además he dicho varias veces que ese no es el objetivo principal, lo que estamos buscando es que se gobierne bien la ciudad y eso es lo que hacemos todos los días”, afirmaba López Obrador en aquellos instantes.

Sin embargo, años más adelante, llegaría un momento especial, el 26 de julio de 2005, fecha que López Obrador, presentaba su renuncia al cargo de Jefe de Gobierno mediante una carta enviada a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y en ella pide que ésta se hiciera efectiva a partir del 29 de julio de ese mismo año, ya que a partir de ese instante, entraría en escena Rumbo al 2006 por la Presidencia de la República.

En su clásica mañanera, daba a conocer algunas reflexiones y expreso: “hay que poner a trabajar a la gente, hay que invertir mucho en la construcción de viviendas, en obras públicas”.

Señalaba que para reactivar al país, era necesario un programa emergente que fortalezca el mercado interno mediante la generación de políticas públicas orientadas a la construcción de obras, pues precisamente con esta actividad se pueden generar empleos.

En aquellos días, Andrés Manuel mencionaba: “En el caso del gobierno capitalino, la política debe mantenerse al margen de la crisis económica y la economía local, es el enfocar la construcción de obras públicas, tanto en el ramo de vivienda como en vialidades”.

Fue precisamente en su mandato como Jefe de Gobierno del Distrito Federal que la Capital de la República, conto con obras y vialidades que le brindaron un nuevo rostro, vialidades que no significaron ningún costo de peaje para sus usuarios, los segundos pisos.

No puede olvidarse, que cuando AMLO fue jefe de Gobierno lo que hizo es impulsar los programas sociales, es decir, dio pensión para los adultos mayores, becas a madres solteras y discapacitados, se construyó la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, llevó  cabo, todo los días, reuniones de seguridad para saber cómo era la inseguridad en el DF.

Hay que recordar que las famosas "mañaneras", conferencias de prensa convocadas todos los días al amanecer, fueron ideadas para cumplir la promesa de mejorar la coordinación en materia de seguridad pública. Pero muy pronto se convirtieron en una forma de comunicación que sirvió a AMLO para dictar diariamente la agenda política en el Distrito Federal y nacional.

Las acciones emprendidas por López Obrador en su administración en el Distrito Federal, se tradujeron en beneficios concretos para los más pobres y vulnerables de la Capital de la República, tales como: pensiones y asistencia médica-social domiciliaria a los adultos mayores; becas para hijos de madres solteras y para personas con discapacidad; útiles escolares; atención y ayuda a jóvenes en situación de riesgo; créditos a microempresarios; apoyo a la producción rural; apoyo al autoempleo, así como ampliación y rehabilitación de vivienda.

Otros programas que fueron significativos fue lo relativo a la construcción y remodelación de unidades habitacionales y se aprobó la construcción de 16 preparatorias y la Universidad de la ciudad de México. En forma paralela, la administración de López Obrador tuvo un acercamiento con los empresarios. La industria de la construcción tuvo un auge sin precedente en la ciudad. Se desarrollaron importantes vialidades tales como puentes, ciclopistas, corredores turísticos, distribuidores viales y segundos pisos.

Pero lo más fundamental fue la propuesta de reducir el sueldo de los funcionarios capitalinos, incluido el propio como jefe de gobierno, la "honestidad valiente", la "austeridad republicana" se tradujo en un inmediato ataque a la corrupción y al desvío de fondos públicos.

Avances significativos en la transparencia y rendición de cuentas fueron parte del éxito de López Obrador como Jefe de Gobierno.

Predicar con el ejemplo, apoyar y brindar el respaldo a las necesidades más sentidas de la población, fue el sello que caracterizo a la administración de López Obrador en la capital de la República, apoyando a los que menos tienen, fueron bases esenciales de su éxito y el respaldo ciudadano. “Primero los Pobres”, no fue un slogan, sino una necesidad urgente que se atendió en la Capital de la República.

Es así como, retomamos esa frase de Andrés Manuel, “denos por muertos” en estos momentos, ya que nuestra labor que realizamos como Colectivo Carlos Montemayor con diferentes Frentes y Colectivos a favor de la Cuarta Transformación, son tareas que exigen nuestra plena atención.

Hay tiempos y momentos de definiciones, que se darán y llevaran a cabo de manera oportuna, ni descartamos ni aceptamos estar en busca de un cargo político o público, simplemente, podemos decir que estamos preparándonos para asumir nuevas responsabilidades.

Que nadie se equivoque, si habremos de participar, sabemos que empezaremos de cero en las encuestas, deberán preocuparse cuando en dichas encuestas empiece arrojar datos a favor y que estas muestren incrementos en las preferencias, que conocen y han visto nuestro trabajo y quehacer cotidiano en las comunidades, barrios, pueblos, colonias, fraccionamientos y conjuntos urbanos; será en ese mismo instante que sabremos que nuestra ardua labor comprometida con las causas justas y sociales nos brinda los frutos del respaldo ciudadano.

Por lo anterior, “que nos den por muertos”, ya que pone nerviosos a nuestros adversarios”. Nuestro proyecto es a largo plazo y contempla los años 2023 y 2024, para ello nos esforzamos en coadyuvar a que la Cuarta Transformación se consolide en todo el territorio mexiquense y a nivel nacional, pero si el 2021 nos brinda la oportunidad, la habremos de asumir con responsabilidad, honestidad y respeto.

miércoles, 18 de noviembre de 2020

Unidad en torno a un proyecto común, con el fin de sumar y multiplicar a favor del pueblo. El Pueblo pone, el pueblo quita...

 


No todo es cuestión de sumas y restas, en la política mexicana; también hay división y multiplicación.

Las cuentas alegres, generalmente, dan a conocer resultados favorables tomando como medidas aritméticas la suma y la multiplicación; sin embargo, las cuentas que no son alegres, consideran a la resta y la división.

Lo mismo ocurre, en el ánimo del electorado, no todo es sumar, tampoco es restar, mucho menos es dividir y quizá tampoco multiplicar, la verdad de las cosas, lo fundamental radica en la percepción política, económica y social en que vive y se desarrolla la gente. Todo lo demás es política ficción.

En la política mexicana, la aritmética que se desarrolla, es simple, pero para los analistas e investigadores es cada vez más complejo, todo depende de las variables que se pongan en consideración y como estas interactúan en la gente, en la ciudadanía, en cada uno de los compatriotas.

En la política mexicana, lo primero es sumar, después multiplicar, una vez que ganan, dividir y por último restar, justo en ese orden.

Pero no olvidemos, que las encuestas patito, aquellas que se contratan a modo y aquellas que pretenden generar una percepción de que todo va viento en popa, más temprano que tarde se topan con una triste realidad, los resultados.

Es así como en Ecatepec, quienes están en el poder, dicen estar creciendo en los niveles de aceptación y preferencia de la gente, cuando en realidad, no caminan por las colonias, ni conjuntos urbanos, habitaciones o fraccionamientos, barrios y pueblos por temor a los reclamos de la gente.

Desde los responsables de la administración pública municipal, hasta los mismos representantes populares federales y locales, buscan afanosamente realizar eventos a modo, para evitar que la ciudadanía tome el micrófono y exprese con claridad su malestar, enojo y hartazgo ante los magros resultados que informan en sus respectivos informes de actividades, o labores. Quién teme al pueblo, sabe a ciencia cierta que no ha cumplido con cabalidad a la confianza que la propia población deposito en dichos personas, ya sea mujeres o hombres, nadie se escapa del escrutinio de la población.

Pero ojo, hay nuevos rostros, nuevos perfiles, nuevos protagonistas que están generando expectativas a través de un trabajo constante, permanente, solidario y armónico, que empiezan a crecer como el espuma en las encuestas reales de las propias comunidades, no en esas encuestas que a “modo” realizan los políticos.

Esos nuevos personajes, tanto de “Experiencia” como “jóvenes”, están marcando una nueva ruta que preocupa a propios y extraños, más propios que extraños, ya que la ciudadanía sabe bien y conoce bien a quienes han dedicado su tiempo y su consideración para abrir espacios de dialogo, entendimiento, trabajo en equipo que permita atender de manera conjunta las necesidades básicas de la población que se encuentra en su propio entorno. La ciudadania, conoce muy bien y brinda un voto de confianza por su labor, constancia y consistencia en seguir apoyando y generando condiciones favorables a un proyecto común, que es la Cuarta Transformación.

En cuanto a los deseos de los Diputados Federales, Locales y Presidentes Municipales de pretender reelegirse, pues la verdad de las cosas, ningun dirigente de morena tiene la facultad de brindarles ningun tipo de derecho para hacerlo, ese derecho le corresponde únicamente a la población. Que a nadie se le olvide, que “el pueblo pone y el pueblo quita”, quienes pretendan estar en contra de ese derecho del pueblo y arriban a una reelección sin que la ciudadanía, militantes y simpatizantes haya estado de acuerdo, pagaran muy caro su desdén en las urnas electorales.


Por lo anterior, hay que sumar, multiplicar y dejar atrás esos deseos de dividir y restar, si en verdad deseamos el cambio verdadero y la transformación de México, no queda de otra que sumar y multiplicar y si es posible ser exponenciales y buscar el infinito y más allá.   

¿Por qué, lo primero es sumar?.

En una sociedad plural llena de conflictos de intereses y de visiones del mundo, necesitamos la política para poder convivir y cooperar en paz, justicia y libertad. En México, como en el mundo entero, no hay instituciones políticas perfectas, que sean capaces de resolver las diferentes contradicciones que emanan en la búsqueda de la satisfacción de todos.

Cada ciudadano, cada familia, cada comunidad, cada región, cada estado y por ende a nivel nacional, existen y persisten múltiples problemas, necesidades y requerimientos que la propia ciudadanía demanda y exige atención.

Aunque se presentarán resultados favorables para cada demanda y solicitud ciudadana o comunal, sería insuficiente para resolver todos nuestros problemas, ni para cambiar la naturaleza humana que los causa. Llegaría el momento que el equilibrio, se rompe y una vez más surge la exigencia humana por otras demandas, que se generan por el propia avance de la propia humanidad en el tiempo y en el espacio. Bajo tal visión, siempre habrá problemáticas y necesidades que la sociedad demandará solución, lo fundamental radica que esos problemas y esas necesidades, se resuelvan de manera plena, independientemente, que vuelvan a surgir otras más.

Y hay que aceptar de manera inevitable, que en política los problemas nunca tienen solución, como los tiene un problema matemático. A través de la historia de la humanidad, los problemas políticos se superan mediante el compromiso entre las partes, que ceden hasta encontrar un punto de acuerdo, renunciando a parte de sus condiciones iníciales.

Estos arreglos, convenios, acuerdos son siempre insatisfactorios, quizá para ambas partes que buscan encauzar por buen camino los problemas y serán sujetos a revisión en conformidad a los resultados que se obtengan, quizá se puedan resolver solo algunos de los problemas, y quedan otros latentes. Lo fundamental, radica que es preciso proteger todo aquello que constituya el marco común, para garantizar el mínimo de estabilidad necesario para la vida social y las mejoras progresistas.

Bajo estos términos, la política mexicana que pretende alcanzar el “éxito”, exige la disposición y el empeño por sumar, ya sea personas, grupos, ideas, o perspectivas en un proyecto común. Es encontrar lo que realmente nos une, nos identifica, nos genera empatía y permite trabajar de manera conjunta por un fin común.

La coincidencia y la propia empatía que se genere en torno a la unidad, da lugar a sumar esfuerzos y voluntades, con el fin de poder buscar soluciones creativas mutuamente beneficiosas, crear instituciones que den voz a todos, escuchar las razones ajenas, respetar las sensibilidades, crear lazos y tender puentes de entendimiento, de cooperación, participación y desarrollo.

Y no podemos negar, que la política también tiene su parte inevitable de lucha por el poder, de pulso de fuerzas, de contraste de ideas, de diferencias irreconciliables, de decisión por mayoría simple. Lo que debe ser superado por el consenso, por el respeto, por la apertura y sobre todo por la confianza.

Es así como, el sumar, en vez de restar o dividir, pensando en el bien común a largo plazo, da lugar a que se generen condiciones favorables de desarrollo de las personas y de las instituciones básicas como la familia, las comunidades  y la población.

Bajo tal premisa, la política mexicana debe enfocar con mayor rigor sus baterías en promover y fomentar la suma entre los individuos, comunidades y pueblos, con el fin de avanzar de manera conjunta en resolver las diversas problemáticas, necesidades y requerimientos que demanda y padece la población.

Quienes pretendan sumar esfuerzos y voluntades solo a un fin personal, de grupo, corriente o corporativo, lo que realmente, se esta haciendo es restar y dividir, jamás lograrán sumar.

Quienes suman a favor de un Proyecto Común y lo hacen de manera eficiente, lo que realmente logran es avanzar al siguiente paso que es multiplicar los esfuerzos y las voluntades a favor de todos.

Apostar por “Otros modos de hacer política”

No todo es política ficción, ni arreglos cúpulares, ni dedazos, cargadas y tapados. Esos tiempos han quedado a tras y deben ser depositados en el “basurero de la historia”.

La cuarta transformación, no invita a reinventar a la política y hacerla parte de la propia sociedad, donde la participación ciudadana sea una tarea cotidiana que permita su organización, estructura y fortalecimiento en la toma de decisiones, tanto comunal, regional, estatal y nacional.

En la política actual, aún se perciben acciones como las siguientes:

El divisionismo como recurso artificial, es una forma de dividir para acumular poder. En nuestro país, así como muchos más, sufrimos muchas tensiones artificialmente explotadas por los partidos, entre derecha e izquierda, arriba y abajo, nuevos y viejos, de aquí o de allá o en cuanto a paridad de género, donde la “igualdad” queda al margen. Estas acciones o posturas casi siempre, buscan dividir y jamás pretenden sumar.

En cuanto a los políticos déspotas, quien cree que se puede decidir lo que conviene a todos desde arriba y/o de modo puramente tecnocrático, sin contar con la participación ciudadana, también de quienes están en minoría y de quienes tienen una posición marginal por otras razones (los descartados). Los extremos, generalmente son conflictivos. Si vemos a nuestro alrededor, lograremos darnos cuenta de que existen y siguen pensando que su palabra es “ley”, pues no en la Cuarta Transformación, nadie marca línea, al contrario el pueblo es el que marca el camino a seguir para solucionar los problemas reales de la sociedad.

Por lo que se refiere a los políticos fundamentalistas, que busca imponer las propias ideas o aspirar a que todas se vean hechas realidad a través de la política. Es preciso proponer y convencer, hasta lograr mayorías, aunque eso no se logra sólo mediante el diálogo racional. También hay que aceptar que las mismas ideas básicas se pueden llevar adelante con diversidad de estrategias, muchas veces incluso compatibles entre sí y hasta complementarias. Nada es absoluto, todo es relativo.

Los Políticos testimoniales o de teatro, hacen política con complejo de víctima, o buscan directamente ser “mártires” porque la sociedad no comparte nuestros valores, no aporta nada constructivo, y puede reducir la imaginación para crear las condiciones para lograr avances positivos.

Sin lugar a dudas, en la política actual, ya no es conveniente la política ficción, hoy se vuelve urgente la Política de la Cuarta Transformación, donde el objetivo de es cambiar al país, transformarlo con cambio verdadero y este hecho es loable.

Y definitivamente, lograr la Transformación a través de la Cuarta Transformación no es una pretensión, es un propósito. Si se logra, será para el beneficio de los mexicanos y del país.

Por lo anterior, sumar, multiplicar es tarea de la propia sociedad, y morena en estos momentos, debe demostrarse así mismo, que esta institución política, no es solo de un hombre, es de un gran número de mujeres y hombres que desean la Transformación del país en beneficio de todos.