viernes, 11 de septiembre de 2015

Pobre Nuevo PRI hasta la vergüenza ha perdido.

La Defensa del PRI de la mentira del Estado
Primera Parte
Muy bien lo dijo Luis Donaldo Colosio en su discurso del 6 de Marzo de 1994, expresando con gran convicción de que el Partido Revolucionario Institucional, tenía que cambiar, transformarse y caminar cerca de la gente.
Sin embargo, el Nuevo PRI que existe hoy en México, realiza todo lo contrario, cada vez se aleja más de la gente, cada vez se aleja más de sus principios básicos que le dieron origen como institución política, cada vez se transformar para ser un partido político a favor de los grandes capitales y cada vez los propios priistas se convierten en pequeños empresarios y grandes empresarios atentando con lo que históricamente lograron generar a través de décadas y debilitando la capacidad del Estado.  
Luis Donaldo en su discurso del 6 de marzo decía con plenitud, “Aquí está el PRI con su fuerza. Aquí está el PRI con sus organizaciones; está con su militancia, está con la sensibilidad de sus mujeres y de sus hombres. Aquí está el PRI con su recia vocación política. Aquí está el PRI para alentar la participación ciudadana.
Aquí está el PRI para mantener la paz y la estabilidad del país, para preservar la unidad entre los mexicanos. Aquí está el PRI en pie de lucha. Aquí está el PRI celebrando un año más de intensa actividad política.
Aquí está el PRI que reconoce los logros, pero también el que sabe de las insuficiencias, el que sabe de los problemas pendientes.
Aquí está el PRI que reconoce que la modernización económica sólo cobra verdadero sentido, cuando se traduce en mayor bienestar para las familias mexicanas y que para que sea perdurable debe acompañarse con el fortalecimiento de nuestra democracia. Esta es la exigencia que enfrentamos y a ella responderemos con firmeza.
El PRI reconoce su responsabilidad y ésta es de la mayor importancia para el avance político de México. Los priístas sabemos que ser herederos de la Revolución Mexicana es un gran orgullo, pero ello no garantiza nuestra legitimidad política. La legitimidad debemos ganarla día con día, con nuestras propuestas, con nuestras acciones, con nuestros argumentos.
Como Partido, tuvimos un nacimiento que a todos nos enorgullece: el PRI evitó que México cayese en el círculo vicioso de tantos países hermanos de Latinoamérica, que perdieron décadas entre la anarquía y la dictadura.
La estabilidad, la paz interna, el crecimiento económico y la movilidad social, son bienes que hubieran sido inimaginables sin el PRI.
Pero nuestra herencia debe ser fuente de exigencia, no de complacencia ni de inmovilismo. Sólo los partidos autoritarios pretenden fundar su legitimidad en su herencia. Los partidos democráticos la ganamos diariamente.”
Luis Donaldo, sabía a ciencia cierta que el PRI empezaba a caminar por un sendero de inconsistencias, de pérdida de identidad y responsabilidad social. Los acontecimientos que en esos días se suscitaban en México, colocaba al PRI en una gran encrucijada, emprender un camino junto con la ciudadanía o seguir los designios de intereses de organismos financieros y grandes capitalistas, quienes presionaban con gran fuerza a los gobiernos emanados del PRI con las crisis recurrentes, endeudamiento y errores políticos y sociales.
Luis Donado, señalaba en el Monumento a la Revolución lo siguiente:
“Amigas y amigos del partido:
Surgimos de una Revolución que hoy sigue ofreciendo caminos para las reivindicaciones populares. A sus principios de democracia, de libertad y de justicia es a los que nos debemos.
Los ideales de la Revolución Mexicana inspiran las tareas de hoy. La Revolución Mexicana, humanista y social, nos exige y nos reclama. La Revolución Mexicana es todavía hoy nuestro mejor horizonte.
Encabezaremos una nueva etapa en la transformación política de México. Sabemos que en este proceso, sólo la sociedad mexicana tiene asegurado un lugar. Los partidos políticos tenemos que acreditar nuestra visión.
En esta hora, la fuerza del PRI surge de nuestra capacidad para el cambio, de nuestra capacidad para el cambio con responsabilidad. Así lo exige la Nación.”

Un cambio que jamás llego, un cambio que fue detenido abruptamente y un cambio que provoco la decadencia del PRI, el cual quiso manifestarse con una nueva visión, un PRI empresarial, abusando de la confianza de la población para hacer negocios a través de los propios recursos de la nación.


Continua....

No hay comentarios: