En la política como en la
guerra, todo se vale. Sobre todo cuando se quiere mermar a una institución
política que esta a punto de hacer trizas una oposición sin alma, sin ángel,
sin idea y sobre todo sin propuestas.
¿Qué pretenden hacer los
opositores?. Su “operación infiltración”,
algo parecido al Caballo de Troya pero a la moderna, buscando el momento
propicio para salir de la panza del caballo de madera y agarrar a los
morenistas dormidos para destruir su grandeza.
De entrada la oposición sabe,
que el proceso de elección
2021, esta en “chino”, hay temor que la oposición
se reduzca, a su mínima expresión,
perdiendo espacios de gubernatura y solo obtenga cargos “plurinominales”, tal como aconteció en el 2018, morena
podría llevarse todo y eso aterra a la oposición.
Se prevé un desastre, sobre todo para el
PAN y PRI, en cuanto al PRD, pasaría lo mismo que ha ocurrido en el senado, desaparecería de
manera natural. En el 2012, ya lo habíamos señalado, que el PRD desaparecería, muchos
expresaron que jamás sucedería y que el Sol Azteca prevalecería y
morena perdería su registro en el 2015, máximo le brindaban la esperanza que
llegaría al 2018, y ya ven, ahora esta en busca de expandirse por todo el país.
Pero, la historia se escribe con letra de oro, y seguirá escribiéndose en
los próximos meses, ya que los morenistas serán los arquitectos de su propio destino.
Quién piense, que aquellos que sean candidatos tendrán el triunfo de manera abrumadora,
hay que decirles que del plato a la boca se cae la
sopa, que ningún
adversario es pequeño, que el exceso de confianza es un mal consejero y vuelve
locos a los políticos banqueteros.
Por lo que se refiere al tema
que estamos tocando, hay voces, que de manera desesperada llaman a los diversos partidos y
minipartidos que conforman a la oposición
a una Gran Alianza Opositora, con el fin, de poder ser
competencia y arrebatar espacios a morena y sus aliados. Ya que para ellos, morena
esta llevando a la crisis sanitaria y económica al país. Que es el causante del
apocalipsis que se avecina.
Así mismo, diversos lideres empresariales,
están convencidos que es necesario revertir la situación que actualmente se
padece, ya que la Cuarta Transformación y quién lo encabeza, esta causando
estragos en sus cuentas alegres que en sexenios anteriores manejaban con
jubilo, sus finanzas en la “nueva
normalidad”, pueden pasar por un tsunami de grandes proporciones, por ello,
su gran preocupación. Extrañan los privilegios y apoyos de antes.
Para la oposición, la situación, es tan complicada
en conformidad a sus análisis electoral;
encuestas e información de primera mano, los colocan al borde del
precipicio. Sin embargo, se espera respuestas
contundentes que vayan dirigido en hacer dudar y convencer a morenistas para
que se adhieran a la oposición, sin necesidad de estar afiliados, pero tendrían
la posibilidad de encabezar candidatura de una alianza opositora. Hay
indicios de que morenistas van a ser seducidos, para que formen
parte de las candidaturas de la propia oposición. Y no serán morenistas con
piel de oveja perredista, panista o priistas, no… ya que
sería un grave error estratégico, lanzar a morenistas con un historial de dudosa reputación partidista, deben ser morenistas
que no tengan cola que les pisen, pero conozcan el teje y maneje del trabajo en
campo, en la conformación
de estructura, comités y de organización territorial, en
pocas palabras deben ser expertos “jóvenes” o “adultos”, que han sido
o fueron relegados, olvidados o
ignorados en la primera etapa de grandeza de morena como fue 2018. Para que la cuña apriete debe
ser del mismo palo….
Otra propuesta, que se comenta, es aquella que ha dado resultados
recientemente, y se esta convirtiendo en el talón
de Aquiles del movimiento - partido. Se le denomina, “operación infiltrados”,
el cuál
consiste en que integrantes del PAN, PRI, PRD y demás partidos satélites,
puedan lograr penetrar en las listas de candidatos de morena, así como aconteció en el 2018, una vez
adentro y logrando
la victoria con los colores de morena, convertirse en independiente o de
plano pasarse a las filas del partido de sus amores.
Hay una regla básica en la política, que no debe olvidarse, “mientras
uno suma, su adversario resta”. El saber cabildear y negociar, es la esencia de la
política, esa labor habrán de implementarla la oposición, no les queda de otra.
La primera oleada, utilizada por la oposición fue
esa en el 2018, van a aprovechar la reelección. Para obtener una vez más el
cargo y ahora sí, sálvese el que pueda. El 2023 y 2024 son los años de mayor
importancia para la oposición en el estado de México, pero para la gran mayoría
de los partidos será el 2021, es la madre de todas las batallas y se pondrá
toda la experiencia política y electoral que se dispone, no será un día de
campo para nadie.
Los partidos de la oposición
saben que una confrontación directa contra morena, es un verdadero desgaste
innecesario y un suicidio político. Es necesario recurrir a otro tipo de
estrategia, que permita por una parte fortalecer la imagen partidista de las
instituciones políticas de la oposición, llámese PRI, PAN, PRD o partidos satélite
y recuperar la confianza de la ciudadanía en general, no solo de sus pequeños
grupos, ya que para ganar el 2024, se requiere más de 30 millones de votos. Así
de fácil y sencillo es la gran responsabilidad de los expertos en campañas
electorales. La oposición necesitará de más que expertos para doblar a morena
en el 2021 y proyectarse Rumbo al 2024 con saldo positivo, una tarea para
titanes.
Y un enemigo común para todos los partidos políticos, es el
confinamiento, la crisis sanitaria y la crisis económica. Quién realmente
brinde respuestas creativas, innovadoras y con resultados palpables a la
población para atender las necesidades y requerimientos de la población, tendrían
la gran responsabilidad de ocupar el poder. La ciudadanía requiere y exige
soluciones, no promesas.
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