Si partiste Rosca de Reyes y te salió el niño, ahora tienes que pagar o ser parte de los que tienen que llevar los tamales o si eres, simplemente, un fanático de este platillo, debes saber que el Museo Nacional de Culturas Populares inauguro el 29 de enero la edición XXXI de la Feria del Tamal donde la cultura, la gastronomía y la danza deleitarán los sentidos de los asistentes al Museo, ubicado en Av. Miguel Hidalgo 289, Del Carmen, Coyoacán.
La feria será del 29 de enero al 2 de febrero, donde una variedad de tamales y bebidas típicas para acompañar este alimento se podrá disgustar. Aun es tiempo que asistas a esta celebración
La feria también es un espacio de convivencia familiar y comunitaria en torno a una tradición culinaria emblemática, donde participan 50 expositores provenientes de 10 entidades de la República Mexicana (Chiapas, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Puebla, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Yucatán); siete alcaldías de la Ciudad de México (Coyoacán, Iztacalco, Milpa Alta, Tláhuac, Tlalpan y Xochimilco), y cinco países de América Latina (Colombia, El Salvador, Guatemala, Honduras y Venezuela).
La inauguración del evento estuvo a cargo por la directora del MNCP, Yessica Morales Vega, quien dio la bienvenida y agradeció la confianza de las y los expositores en el proyecto que ha trascendido por más de tres décadas.
A su vez, la directora de unidades regionales de la Dirección General de Culturas Populares Indígenas y Urbanas (DGCPIU), Tania Mena, resaltó la trascendencia del tamal: «Imagínense su importancia que hay más de 4,000 recetas con distintos rellenos, formas de hacer masa y maneras de envolverlos, ya sea con hojas de hoja santa, de plátano o la tradicional de maíz. Toda una muestra de cultura y tradición».
Variedad más allá que de chile, mole o dulce
Entre los expositores se encuentra Albert Bayer, quien compartió la tradición del tamal panameño. La participación de Wilmer Ruiz, de Venezuela, quien ofrece hallacas preparadas a la leña, y Lilian Mendoza Rivera, de Honduras, quien trae variedades como los nacatamales y las montucas.
En el marco de la conmemoración del Día de la Candelaria, las y los asistentes degustarán tamales tradicionales dulces –como los de zarzamora con queso, fruta seca o piña con pasitas–, o salados –por ejemplo los de chapulines y de acociles–, acompañados de bebidas típicas como atole en sus diversos sabores por región, champurrado, pozol y una variedad de aguas frescas.
Además, la feria ofrecerá un programa de actividades culturales que incluye conversatorios, música, charlas y recorridos por la exposición “Niño Dios: Sincretismo de una Tradición”.
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