Primero fue Aurelio Nuño,
quién es llamado de la Secretaria de Educación para asumir el espacio de
Coordinación de Campaña de José Meade.
Ahora es, el ex
gobernador mexiquense Eruviel Ávila Villegas y es nombrado vicecoordinador
general de la campaña presidencial del priista José Antonio Meade.
En estos momentos, tres
precandidatos que aspiraban a ser elegidos como candidatos a la Presidencia de
la República por parte del Revolucionario Institucional, unen esfuerzos para
organizar y coordinar las actividades del precandidato del PRI, José Antonio
Meade.
A que se debe esta suma
de esfuerzos y voluntades, para algunos analistas esto se deriva a la plena
intención y la necesidad de fortalecer al equipo de trabajo de José Meade, que
no levanta entre el electorado, su inexperiencia en la jerga política y
cercanía con la ciudadanía es más que evidente.
Para otros, la inclusión
de los precandidatos que no fueron elegidos, esperaran la oportunidad de que si
Meade continúa en caída libre en la intensión del voto, se de la señal que
alguno de los coordinadores de campaña del precandidato asuma el control y la
candidatura.
Mientras que otros más,
consideran que de los tres precandidatos que ahora trabajan en equipo por
fortalecer al Revolucionario Institucional no cuentan con los espolones y la
calidad moral que permita hacer crecer al PRI en las preferencias electorales y
el hundimiento del tricolor se ve más que probable.
Durante una ceremonia
privada, en la sede de la Fundación Colosio, el coordinador de la campaña,
Aurelio Nuño, dio la bienvenida al mexiquense, quien dejó el cargo de delegado
del CEN en el PRI de la Ciudad de México.
Existe la inquietud que
esta designación y la presentación de Eruviel Ávila al grupo de Coordinación de
campaña se hizo más con calzador, que por decisión de Antonio Meade, ya que ni
estuvo presente en su la presentación de Eruviel y este hecho corrió por parte
de Aurelio Nuño.
Para estos tres alegres “precandidatos”,
las cosas pintan de color hormiga, ya que Meade se encuentra en las encuestas
de diversas casas encuestadoras en tercer sitio y alejándose cada vez más del
puntero que es Andrés Manuel López Obrador.
Por otra parte, se
escuchan voces de que el Estado de México, puede ser un bastión de importancia
a favor de AMLO en las elecciones del 1 de Julio, hay optimismo y deseos de la
gente por el cambio, no solo de los propios morenistas que se han multiplicado
de manera importante, sino de extraños, como militantes de otras instituciones
políticas que estarían brindando el apoyo a Andrés Manuel.
Sin embargo, en cuanto a
los cargos de representación popular, es otra cosa, ya que todo dependerá a
quienes designen, tanto mujeres y hombres el los diferentes distritos
electorales locales y federales, así como Presidencias Municipales. Muchos de
los que ahora pretenden encabezar las candidaturas traen cola que les pisen y
otros son conocidos por la ciudadanía y la militancia de diversos partidos y saben
que son gente que no se puede confiar.
Es en este aspecto, en
donde existe el verdadero talón de Aquiles de morena, los espacios de
representación, ya que de nada servirá que AMLO arrolle en el Presidencial, si
en el legislativo puede estar a merced de intereses partidistas del PRI, PAN y
el PRD.
Morena debe salir con sus
mejores elementos y que estos no pongan en riesgo el voto mayoritario a favor
del movimiento.
Veremos que acontece, con
esta formula que pone en marcha el PRI en torno a su precandidato Meade, si no
levanta y sigue hundiéndose, tendrán que presentarse ajustes de inmediato, ya
que el Revolucionario Institucional se encuentra entre la espada y la pared,
sus huestes de convicción de la vieja guardia, se están replegando hacia
morena, mientras que los nuevos PRI, se siguen dispersando y disminuyendo de
manera dramática.
El malestar en la ciudadanía
y la clase trabajadora, obrera, campesina y burocracia es más que evidente y no
existen condiciones para mantener la unidad derivado a que en los últimos 40
años, el propio PRI se ha encargado de destruir su propia historia y fortaleza.
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