Cuando un candidato a la Gubernatura piensa en
mantener los programas sociales y poner en marcha otros, es que la política
económica y social que habrá de implementar no resolverá el problema de raíz
que ha dado lugar a que la población no pueda disponer de salarios dignos que
coadyuven a elevar su poder adquisitivo, a que no existen condiciones para
generar mayor número de empleos y que existirá graves problemas de seguridad, por
lo que será necesario poner en marcha diversas acciones de mayor vigilancia y
botones de pánico que coadyuve a prevenir el delito en el transporte público y
los hogares, por lo que será necesario implementar nuevos programas de apoyo
como “Salario Rosa”, por lo que será necesario ampliar la cobertura de “comedores
comunitarios” Pensión para Adultos Mayores, “Piso Firme” y fortalecer el de “Vivienda
Mejorada”, estos últimos, son programas federales, más no estatales.
El mensaje de Alfredo del Mazo, va
más con lo mismo, prometer recursos del erario para solventar la pobreza y marginación
que padece los mexiquenses. Pero con el incremento que día a día presenta la
Deuda Pública, no habrá recursos disponibles para financiar los programas; al
no contar con una Industria Energética propia, lo que deriva a que no se
dispone de los recursos necesarios para apoyar a los Estados y municipios, lo
cual se vislumbra que los recursos para poder financiar los programas debe
recaudarse a través de los Impuestos y el incremento de los precios de los
energéticos, donde el Gobierno podrá generar mayor recaudación.
Dentro de su decálogo, del Mazo, nos
brinda, una vez más una promesa que ha sido incumplida por diversos gobernantes
en el Estado de México, como lo es garantizar el manejo de los recursos
naturales, promover la modernización para un campo más productivo, además de combatir
la corrupción y la impunidad, asignaturas que hasta al momento son el talón de Aquiles
de los gobiernos priistas.
Señaló que promoverá la instalación
de cámaras de videovigilancia y botones de pánico en unidades de transporte
público; duplicar el número de cámaras de videovigilancia instaladas en el
estado, que se sumarán a las 10,000 que ya existen, así como construir dos C5
más, uno en Naucalpan y otro en la Zona Oriente de la entidad; salarios justos
para dignificar la labor de los policías, además de tener una policía de
proximidad, confiable y cercana a la gente, lo anterior refleja que es un fiel
indicativo que se vienen tiempos de mayor inseguridad.
Como podrá
apreciarse, si un candidato piensa en seguir con más de lo mismo, es que no
existen las condiciones adecuadas ni las propuestas necesarias que permita que
la situación que prevale en el Estado de México se Transforme, cambie o se
modifique. Por ello, sálvese el que pueda.
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