martes, 11 de abril de 2017

César Camacho se desgarra las vestiduras y amenaza a Alejandro Armenta para que retire su firma del Acuerdo de Unidad de Prosperidad y Renacimiento de México.

Indudablemente, que el diputado federal Alejandro Armenta, tiene razón al señalar que, “el PRI se ha alejado de sus principios fundacionales por permitir el saqueo y la violación de derechos humanos”.
Y ante un hecho, que es palpable y eminente, quién quiera tapar el sol con un dedo, es que es cínico y no tiene vergüenza.
Para nadie que se diga ser priista, puede decir que el Nuevo PRI, ha logrado generar un país de grandes transformaciones, al contrario, han provocado que las instituciones que fueron diseñadas y creadas con esmero por la militancia priista y las organizaciones sociales, patronales y empresariales, ahora se encuentran en la ruina y por desaparecer.
César Camacho, al igual que un gran número de priistas que se mantienen en los cargos legislativos y gubernamentales, han sido cómplices no solo de derrumbar una historia de grandes logros realizados por mujeres y hombres del Partido Revolucionario Institucional; además, han provocado la desolación de un país y están cavando la tumba a un partido político que se derrumba por sus errores y desaciertos, el Nuevo PRI es una caricatura mal hecha del Viejo PRI.
La decisión de Armenta Mier, al firmar el Pacto por la Unidad de México propuesto por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y Andrés Manuel López Obrador sin presentar su renuncia al Partido Revolucionario Institucional, ha generado no solo una oleada de criticas y respuestas dentro del PRI, también, ha provocado que hombres y mujeres que conocen la historia verdadera del PRI tengan conciencia de que su institución política esta al borde del desastre y desaparición, porque hoy más que nunca, ha perdido el control de las gubernaturas de los Estados, el saqueo y la corrupción ha sido la constante de aquellas entidades que ha perdido el PRI en los recientes años.
El coordinador del grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, César Camacho, indicó que “los priistas reprobaban la asistencia del diputado al mitin del Morena al cual secundó con su firma en el pacto y solicita que retire su firma del documento que suscribió y refrendar públicamente su militancia y compromiso con nuestra organización política”.
El diputado federal del PRI, Alejandro Armenta Mier, justificó que haber firmado el acuerdo de unidad de Morena es un acto congruente con los estatutos del tricolor que lo señalan como un partido “progresista y democrático”; “no me voy del PRI”.
En rueda de prensa, aseguró que dicha decisión se la comunicó “oportunamente” a su dirigente estatal, Jorge Estefan Chidiac, a quien desde su perspectiva la dirigencia nacional del partido, “también lo han dejado solo”.
En ese sentido, reiteró su llamado al Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI para que ejerza las funciones que le corresponde en Puebla, con el objetivo de construir una oposición objetiva con critica contundente, “no dejemos pasar la oportunidad de ser oposición para encabezar las demandas ciudadanas”, sentenció.
Al confiar en que el PRI sea un partido democrático, dijo no temer ser expulsado tras acudir a un acto proselitista de otro partido político, “como militante de un partido ejerceré a plenitud mis derechos y cumplo con mis obligaciones”,
Al referir el lema del general Miguel Negrete: “Patria antes que Partido”, aseguró que seguirá siendo colosista, revolucionario y priista, por lo que no precisó si contendería en el 2018, con las siglas de Morena.

La presión que ahora el PRI ejerce en contra de Alejandro Armenta a través de César Camacho, es un fiel indicativo de que las aguas empiezan a enturbiarse al interior del PRI, un partido que en el ayer construyo instituciones y ahora las destruye en aras de un México mejor. Sin embargo, para millones de ciudadanos, el Nuevo PRI se ha alejado de los principios básicos que le dieron origen y esta generando una desbandada que lo coloca al borde de su destrucción, la corrupción, el cinismo y la falta de honestidad que ha sido la constante en este sexenio de los Gobernadores y militantes esta cambiando el sentido de pertenencia e identidad de quienes aún confían y se encuentran en el Partido Revolucionario Institucional. 

No hay comentarios: