Hoy más
que nunca la Educación de México, requiere con urgencia a los principales
protagonistas de la formación del conocimiento, valores, moralidad, ética y desarrollo
de la educación.
Nadie,
absolutamente nadie, puede quedar exento de sus tareas y responsabilidades, es
el momento de que cada uno de los participantes asuman con plenitud su labor y
lo realice a la perfección, para recuperar el tiempo perdido y demostrarle a
propios y extraños que cuando se asumen los compromisos y se cumplen con
cabalidad los logros y los éxitos arriban de manera plena.
Hoy más
que nunca, los alumnos deben inundar las aulas de clase con su presencia y
exigir fervientemente una enseñanza de calidad, deben asumir el compromiso de
que su preparación tanto ética, moral y de valores; así como de conocimientos
sea acorde a las necesidades y requerimientos de nuestro país.
Hoy más
que nunca, los Maestros deben ceder a
sus pretensiones legales, laborales y honestas y actúen con plena armonía a lo
que demanda la sociedad de México, que es brindar su experiencia y conocimiento
para preparar, formar, educar y generar a mujeres y hombres de bien, que sean
honestos, confiables, respetuosos, creativos, innovadores y vanguardistas, a
mujeres y hombres que amen a su patria, amen a su prójimo, amen a sus
instituciones y amen a México.
Hoy más
que nunca, los Padres de Familia, deben ser parte de la educación permanente de
sus hijos, asumir la responsabilidad de ser sus tutores y de ser parte de la
educación de sus hijos, no solo con llevarlos a las aulas de clase, sino de
brindarles los ejemplos claros y palpables de honestidad, respeto, armonía,
amor, moral, valores, principios y disciplina, desde el seno familiar debe
gestarse el modelo de educación que incida favorablemente en el desarrollo y
consolidación del país.
Hoy más
que nunca, se requiere la presencia de las autoridades educativas para que
brinden los espacios educativos de calidad y eficiencia que demanda la sociedad
mexicana, que existan escuelas públicas en todos los rincones del país y
permitan la preparación de nuestros niños, jóvenes y adultos. La educación es
permanente y por ello bajo ninguna circunstancia se puede detener el concepto
de formación. Las autoridades deben proveer a las escuelas de los materiales y
herramientas necesarias para que los alumnos, profesores y padres de familia
puedan realizar sus tareas y responsabilidad con eficiencia y calidad. Las
autoridades educativas deben incentivar y motivar la educación plena y de
calidad otorgándoles a los maestros sueldos dignos y acordes a la gran
responsabilidad que ejercen en su profesión.
Las
autoridades educativas, deben comprometerse por generar las condiciones
propicias para que la educación en México llegue a todos los rincones del país,
sea de calidad y cumpla cabalmente con las necesidades y requerimientos de
nuestro país en el concierto internacional.
Hoy más
que nunca, se requiere que tanto alumnos, maestros, padres de familia y autoridades
educativas realicen las funciones y actividades que les corresponde, porque de
todos ustedes depende que en los próximos años podamos disponer de una sociedad
altamente moderna, avanzada, creativa, innovadora, vanguardista, preparada, honesta,
confiable y que disponga de valores sociales altamente responsables no sólo con
su prójimo, sino además con la sociedad misma.
Todos
son protagonistas para que esto suceda, y quienes deberán estar pendientes de
que cada uno cumpla de manera plena con sus responsabilidad que le corresponde
es a la sociedad mexicana, quien no esté haciendo su tarea de educar debe ser
señalado y exhortado a que realice el papel que le corresponde.
Porque
México necesita un Modelo de Educación acorde a sus necesidades y
requerimientos futuros, es necesario que autoridades educativas de los tres
niveles de gobierno, Padres de Familia, Maestros y Alumnos, cumplan con su
tarea y responsabilidad.
Y
aquellos que directa o indirectamente deben ser parte de la solución del
problema, como es el Congreso de la Unión quien es el encargado de canalizar
los recursos indispensables a la educación, ahora tienen la gran
responsabilidad de proveer de los mismos de manera plena y vigilar y fiscalizar
de manera conjunta con la población de que los recursos se ejerzan de manera
adecuada hacia cada una de las acciones y necesidades que demanda la educación.
La
educación es gratuita y debe prevalecer de manera gratuita, quién pretenda su
privatización, será necesario invitarlo a que regrese a las aulas de clase para
que se le brinde un curso intensivo de la importancia de la educación pública.
Ni
crisis, ni devaluaciones, ni colapsos financieros deben ser pretexto para
detener la educación de México.
Por todo
lo anterior, se invita cordialmente a que los tres niveles de gobierno, Padres
de Familia, Maestros y Alumnos, cumplan con su tarea y responsabilidad que el
país les demanda.