Se aprueba las Reformas a la LOAPF
Andrés Manuel López Obrador, a pesar de que aún no es Presidente
de la República de manera oficial, hasta el 1 de Diciembre, provoca enfrentamientos
y protestas de los partidos de oposición en la Cámara de Diputados por su
intención de transformar con cambio verdadero el país.
Sin lugar a dudas, Andrés Manuel es el ave de las tempestades
que genera temor, miedo, incertidumbre y sobre todo pavor a quienes por décadas
lograron aprovechar el espacio público para enriquecerse de manera descarada y
generar negocios turbios al amparo de leyes a modo construidos para tal efecto.
Sin embargo, se
avizora un cambio de timón que impactará en todo aquello que fue hecho al
amparo del poder por el poder y este hecho causa graves temores de quienes se
vieron beneficiados y ahora pretenden que nada cambie.
Diputados del Partido Acción Nacional (PAN), en esta ocasión se
encuentran como partido opositor y acostumbrados a negociar, concertar y
obtener beneficios, se sienten excluidos ante la negativa del movimiento
regeneración de conceder privilegios y ventajas a quienes se han enriquecido
por décadas a costa del dolor y sufrimiento de la población.
Los Diputados panistas tomaron este martes la tribuna de
San Lázaro con pancartas en las que escribieron #NoALaDictaduraObradorista para
protestar por una reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública, donde
habrá cambios en cuanto a la estructura y nombre de algunas secretarías de
Estado, creando otras y modificando mecanismos de compra en gobierno.
Que hay detrás de la defensa inusitada por parte del grupo
parlamentario panista que provoca una sin razón tan simplista y poca seria en
su labor legislativa. Pues, hay que investigar con mayor profundidad que tipo
de negocios o ventajas, se ven afectados quienes en el ayer ostentaron el
poder.
Durante la discusión y votación de esta propuesta, legisladores
de oposición y del partido mayoritario de Morena, que llevó a la presidencia a
López Obrador, cruzaron acusaciones y descalificaciones que obligaron a
suspender la sesión.
Cabe mencionar, que la reforma legislativa ya había sido
aprobada en lo general con 305 votos a favor, 97 en contra y 62 abstenciones.
De esta manera, el partido Morena concretó los cambios previstos por López
Obrador para iniciar su gobierno, el próximo 1 de diciembre.
Los cambios que se presentaron en la Ley Orgánica de la
Administración Pública, autoriza, la creación de la
nueva Secretaría de Seguridad Pública y el traslado a esta del
Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
También, suscribe la
creación de la figura de delegados, que operarán para el gobierno federal en
cada una de las 32 entidades del país y podrán participar en temas de
seguridad pública en los consejos técnicos de cada estado.
La reforma, además, le
otorga mayores facultades a la Secretaría de Hacienda para mejorar sus
funciones y actividades y se disponga de una sola oficina de Oficialía Mayor, que
sea la responsable de todas las compras y las licitaciones
gubernamentales, buscando con ello erradicar la corrupción y mejorando la
transparencia y rendición de cuentas.
Asimismo, se autoriza la
desaparición de las oficinas de Comunicación Social de todas las dependencias
federales y su concentración en una sola que estará bajo el control de
la Presidencia de la República, en Palacio Nacional.
En cuanto a la
Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), esta cambia de nombre y ahora se
denominará en Secretaría del Bienestar y
con esta ley comenzará la descentralización y el traslado de varias de
las dependencias federales a diversos estados de la República.
Fue una jornada
legislativa larga, sin embargo, se dio luz verde a las reformas que representan
en primera instancia un paso fundamental en trasformar y mejorar la
administración pública federal y su funcionamiento.
Ante lo eminente y la falta de argumentos sólidos que incidieran
en detener los cambios que planteaban a la Ley Orgánica de la Administración, los
diputados del PAN subieron a tribuna con una enorme pancarta y el
grito "¡Es un error tener un dictador!", lo que motivó el
jaloneo con los legisladores de Morena.
Los panistas, en su
afán de generar un impacto mediático, protestaron y acusaron que la próxima
administración federal prepara el terreno para un gobierno antidemocrático y
sin contrapesos.
Argumentos, sin lugar a dudas, sin bases, ni sustento.
Simplemente, mostraron que ser oposición es un terreno que no les gusta y no
saben actuar bajo condiciones de presión. Acostumbrados a la negociación y concertación,
sentirse derrotados y desplazados, les provoca una confusión política, cayendo
en los extremos de las descalificaciones sin sentido y sin razón.
En cuanto a los diputados
René Juárez y Ricardo Gallardo, de PRI y PRD, respectivamente, expresaron
disposición al diálogo con Morena, pero pidieron "respeto a las
minorías", "no pisotear la Constitución ni el Federalismo", y no
crear "autoridades intermedias" con los llamados "súper
delegados", entre otras.
Al final de cuentas, el respeto a las minorías existe, pero esas
minorías que hoy prevalecen en la Cámara de Diputados, desean que sean tratadas
como mayorías.
Ante el deseo de reventar la sesión por parte del PAN, el
diputado presidente Porfirio Muñoz Ledo concluyó la para después convocar a una
“sesión vespertina” y continuar con la discusión en lo particular.
Sin la presencia de las bancadas del Partido Acción Nacional
(PAN), Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC),
el pleno de la Cámara de Diputados integrado por el Movimiento de Regeneración
Nacional (Morena) y por la bancada del Partido Revolucionario Institucional
(PRI), aprobó en lo general y particular el proyecto de reformas a la Ley Orgánica de la Administración
Pública Federal.
Así a las 19:20 horas se reanudó la discusión para librar los
artículos con reservas, principalmente al artículo 17.
La Ley Orgánica de la Administración Pública
Federal, su aprobada en lo general y particular, con diversas adicciones. Lográndose
con ello disponer de una nueva Ley Orgánica de la Administración Pública
Federal.
En resumen puede decirse que los principales
cambios que se aprobaron fueron los siguientes:
·
Se crea la Secretaría de Seguridad Pública y
Protección Ciudadana.
·
Todas las direcciones jurídicas de cada
Secretaría se coordinan a través de Presidencia para evitar actos de
encubrimiento y corrupción.
·
Se compacta la Administración Federal, en
mandos medios y altos, y se eliminan áreas duplicadas.
·
En la Secretaría de Energía se sectorizan los
Órganos Reguladores en materia energética.
·
Las figuras de los delegados estatales han sido aprobadas,
·
Desaparecen las direcciones de compras de cada
Secretaría.
·
Desaparecen las oficialías mayores de las
Secretarías de Estado.
·
La Secretaría de Desarrollo Social cambia de
nombre a Secretaría de Bienestar, así como mejoras en sus funciones.
·
Los Secretarios ya no nombrarán a complacencia
a los Órganos internos de control.
·
SEGOB queda como Coordinadora General de todos
los entes federales.
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